Tras recibir un disparo en el pecho de su único amigo de verdad, Genny, Ciro se hunde en las oscuras aguas del Golfo de Nápoles.
A medida que avanza hacia las profundidades, los recuerdos afloran en su memoria. Sonidos débiles se abren paso a través del frío abrazo del agua, gritos ahogados de pánico. Estamos en
1980. Un terremoto devastador derrumba edificios. Sin embargo, bajo los escombros emerge el llanto de un recién nacido. No es
otro que Ciro di Marzio. A partir de ese día será conocido como El Inmortal. Años después, Ciro sobrevive incluso a aquel fatídico disparo. Lo que dicen es cierto: nadie ni nada puede matar al
Inmortal. Desde su pasado como huérfano exiliado del Báltico, de sus primeros pequeños robos, a la guerra de bandas: Ciro se enfrenta a todo en un mundo en el que la inmortalidad es solo otra forma de condena.
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